No incluyas textos tan largos.
Una imagen vale más que mil palabras. Procura emplear imágenes descriptivas que le entregue a tus clientes una idea clara de lo que estás ofreciendo, acompañado de textos breves y concisos.

Excluye el menú de navegación.
Una landing page maneja la misma línea de su web principal. Sin embargo ésta debe resaltar un producto o servicio único a ofertar sin incluir el menú principal para no saturar a tu cliente.

No coloques enlaces externos.
La finalidad de una landing page es capturar datos sobre los clientes. Emplear enlaces externos ocasiona que el cliente no llene los formularios que ofreces. Ni que se suscriba a tu página, lo cual afecta a tu recolección de datos.

No olvides colocar una llamada a la acción clara.
Es fundamental invitar a la acción, ya que la exploración de tu contenido por parte de tu cliente incrementa su interés en el producto o servicio que ofreces.

No olvides agregar botones a redes sociales.
El manejo de redes sociales es crucial para posicionar tu empresa en el mercado ya que estamos en la era de las telecomunicaciones, y las interacciones se llevan a cabo por estos medios.

No utilices tu landing page sólo para vender.
Como mencionamos anteriormente, una landing page se emplea para capturar datos de nuestros clientes, y esto se logra invitándolos a suscribirse para acceder a determinado contenido u ofreciéndoles news letters.

Fuente: blog.infranetworking.com